Apnea obstructiva del sueño

La apnea obstructiva del sueño (AOS) es un trastorno del sueño que afecta a más de 18 millones de estadounidenses, y muchos de ellos ni siquiera saben que lo padecen.

La apnea obstructiva del sueño (AOS) es un trastorno del sueño que afecta a más de 18 millones de estadounidenses, y muchos de ellos ni siquiera saben que lo padecen. Los que sufren de AOS dejan de respirar mientras duermen, a veces por más de un minuto y tanto como 60 veces por noche.

¿Cuál es la causa de la AOS?

Los médicos creen que la AOS es causada por el tejido suave y carnoso del fondo de la garganta (denominado «velo del paladar»). Mientras estamos despiertos, los músculos alrededor del velo del paladar mantienen abierta la vía respiratoria. Pero al dormir, esos músculos comienzan a relajarse. En quienes tienen AOS, los músculos se relajan a tal punto que el tejido del velo del paladar se colapsa y obstruye la vía respiratoria.

Si se obstruye la vía respiratoria, la respiración se enlentece o se detiene por completo. Cuando esto sucede, la reacción natural del cuerpo es despertarnos, típicamente con un fuerte ronquido o jadeo. A continuación, uno se duerme otra vez rápidamente y, en la mañana, probablemente no recuerde haberse despertado durante la noche. Como la AOS puede producirse muchas veces en una noche, es probable que nunca se alcancen las fases de sueño profundo que el cuerpo y el cerebro necesitan para sentirse verdaderamente descansados.

¿Cuáles son los factores de riesgo de la AOS?

El sobrepeso y la obesidad son los principales factores de riesgo de la AOS. La mayor edad también es un factor de riesgo. Además, los hombres tienen un mayor riesgo de AOS que las mujeres, pero el riesgo en las mujeres parece aumentar después de la menopausia. Otros factores que pueden causar la AOS incluyen:

  • Nariz tapada (congestión nasal)
  • Síndrome de Marfan
  • Tiroides hipoactiva (lo que se denomina «hipotiroidismo»)
  • Síndrome de Down
  • Consumo de alcohol
  • Pastillas para dormir
  • Hábito de fumar
  • Inflamación de amígdalas y vegetaciones
  • Cuello grande o grueso
  • Diabetes
  • Antecedentes familiares

¿Qué relación hay entre la AOS y los problemas cardíacos?

Aún no se entiende bien la relación entre la AOS y la enfermedad arterial coronaria (EAC), el ataque cardíaco y el ataque cerebral. Los médicos no saben si la gente con AOS tiene un mayor riesgo de padecer estos problemas de salud, o si su AOS y sus problemas cardíacos son causados por otros factores de riesgo, tales como la obesidad.

La apnea obstructiva del sueño también es muy común en pacientes con insuficiencia cardíaca. En los pacientes con IC, la AOS puede empeorar la enfermedad debido al esfuerzo al que se ve expuesto el corazón durante el sueño.

La gente con AOS típicamente tiene también presión arterial alta (hipertensión). Los médicos no saben por qué estas enfermedades podrían estar vinculadas, pero muchos pacientes que controlan su AOS también observan pequeñas disminuciones en la presión arterial.

Los médicos además han descubierto que algunos pacientes que han sufrido un ataque cardíaco reciente tienen un mayor riesgo de AOS. Debido a esta relación, algunos médicos ahora recomiendan que los pacientes que han sufrido un ataque al corazón se realicen estudios de detección de la AOS.

Las personas con AOS también tienen una probabilidad mucho mayor de padecer ritmos cardíacos anormales (arritmias).

¿Cuáles son los signos y síntomas de la AOS?

Hay muchos signos y síntomas de AOS. El signo más común es el ronquido, pero no todos los que roncan tienen AOS. Los siguientes son otros signos y síntomas de la AOS:

  • Sentirse muy cansado durante el día
  • Despertarse durante la noche con falta de aliento
  • Despertarse en la mañana con dolor de cabeza, la boca seca o dolor de garganta
  • Ser despertado por la pareja por haber dejado de respirar
  • Tener que orinar muchas veces durante la noche
  • No poder dormirse, o no poder permanecer dormido toda la noche (insomnio)

Como no permite dormir lo suficiente, la AOS puede aumentar el riesgo de accidentes automovilísticos y laborales. El no dormir lo suficiente también ha sido vinculado a la pérdida de la memoria, la depresión y la disfunción eréctil.

¿Cómo se diagnostica la AOS?

Si el médico sospecha que usted tiene AOS, éste lo enviará a un centro de trastornos del sueño, donde posiblemente deba pasar la noche. Los siguientes son algunos de los estudios que los médicos podrían realizarle durante la noche:

  • Polisomnografía, estudio en el que se emplean aparatos para monitorizar el funcionamiento del corazón, los pulmones y el cerebro, la respiración y los movimientos de los brazos y las piernas mientras duerme.
  • Oximetría nocturna, estudio que mide la cantidad de oxígeno en la sangre mientras duerme.

En algunos casos, el médico puede suministrar unidades portátiles que permiten realizarse pruebas en casa. El médico puede además enviarlo a un otorrinolaringólogo para descartar otros problemas de la nariz o la garganta.

¿Cómo se trata la AOS?

Existen muchos tratamientos para la AOS, entre ellos los cambios en el estilo de vida, los tratamientos nocturnos y los tratamientos quirúrgicos.

Cambios en el estilo de vida
Si la AOS es leve, hay muchos cambios que puede hacer en su estilo de vida.

  • Adelgace. Incluso las reducciones de peso leves han demostrado ser beneficiosas en pacientes con AOS.
  • Evite el alcohol y las pastillas para dormir, que relajan los músculos del fondo de la garganta.
  • Duerma de costado. Cuando duerme boca arriba el velo del paladar se desliza al fondo de la garganta. Hay almohadas y recursos especiales para ayudarlo a permanecer de costado durante la noche. Incluso algo tan simple como una pelota de tenis colocada en la espalda de la camisa del pijama puede evitar que se dé vuelta durante la noche y termine acostado boca arriba.
  • Utilice un aerosol nasal de solución salina antes de acostarse. Los aerosoles de solución salina son los mejores, porque no contienen medicamentos.

Tratamientos nocturnos
Si los cambios en el estilo de vida no dan resultado, el médico puede recomendarle tratamientos más avanzados.

  • Dispositivos orales o aparatos bucales para uso nocturno. Estos dispositivos están diseñados para mantener abierta la garganta mientras duerme. La mayoría de estos dispositivos avanzan la mandíbula (se denominan «dispositivos de avance mandibular») o mantienen la lengua en una posición diferente (se denominan «retenedores linguales»). El médico lo enviará a un dentista, quien podrá hacerle un aparato bucal a su medida. Es posible que tenga que probar diferentes tipos de aparatos bucales hasta encontrar el más eficaz para usted.
  • Presión positiva continua en la vía aérea (CPAP), que se recomienda generalmente para casos más serios de AOS. Con la CPAP, hay que dormir con una mascarilla sobre la nariz. Una máquina envía un flujo constante de aire presurizado por la mascarilla. Este flujo es mayor del que normalmente respiraría durante la noche, y es lo suficientemente fuerte como para mantener abierta la vía respiratoria. Este método es muy eficaz en el tratamiento de la AOS.
  • Presión positiva de dos niveles en la vía aérea (BiPAP),que es otro tipo de CPAP. A algunos pacientes les cuesta espirar contra el flujo de aire presurizado que la máquina envía por la mascarilla. Las máquinas CPAP de dos niveles pueden detectar cuando los pacientes inspiran y espiran, y pueden reducir la presión del flujo de aire por la mascarilla cuando los pacientes espiran. El médico podría recomendarle una máquina de dos niveles si tiene otros trastornos de la respiración.

Tratamientos quirúrgicos
Los tratamientos quirúrgicos de la AOS pueden incluir desde la extirpación de tejido hasta las operaciones de mandíbula y los implantes en el velo del paladar. En algunos pacientes, la extirpación de las amígdalas o la corrección de un tabique desviado en la nariz es suficiente para curar la AOS.

  • Extirpación de tejido (uvulopalatofaringoplastia o UPFP). En este procedimiento, los médicos extirpan tejido del fondo de la boca y la parte superior de la garganta.
  • Cirugía de la mandíbula (avance mandibular). En este procedimiento, los médicos mueven la mandíbula hacia adelante para dejar un espacio más grande detrás de la lengua y el velo del paladar.
  • Traqueostomía. Este procedimiento sólo se realiza si los otros tratamientos no dan resultado y la AOS es potencialmente mortal. En este procedimiento, los cirujanos colocan un tubo por una incisión en el cuello. Durante el día, el tubo permanece cubierto y se respira por la nariz, de manera normal. Por la noche, se descubre el tubo para dejar entrar y salir el aire directamente de los pulmones.
  • Implantes. Un procedimiento denominado Pillar en inglés o «restauración palatina», es un tratamiento de mínimo acceso para la AOS leve o moderada. El procedimiento consiste en implantar tres barras pequeñas de poliéster tejido en el velo del paladar. Las barras actúan como un armazón para dar rigidez al velo del paladar y evitar que se colapse en la vía respiratoria.